Los cachorros suelen morder mucho como una forma de conocer el mundo que los rodean.Dada la fortaleza de sus dientes, pueden destrozar casi cualquier cosa que tengas en tu casa, por lo que su conducta mordelona podría causarte problemas.
Si cuando juegas con tu cachorro, te muerde, haz un sonido de dolor y detén el juego de inmediato.
Utiliza algún juguete y ofrécele que juegue con él cuando quiera morder.
Con paciencia y consistencia lograrás que tu perro entienda lo que esperas de él.