El bigote de los gatos está formado por pelos más gruesos que el resto de su pelaje. Estos pelos están introducidos más profundamente en la piel del felino, por lo que tienen mayor sensibilidad.
Además de ser una característica típica de los gatos, sus bigotes tienen algunas funciones interesantes, que describimos a continuación.
Con ellos pueden sentir las corrientes de aire, con lo cual pueden ayudarse a sentir sus alrededores. Por ejemplo, por las noches, en una habitación sin luz, los gatos pueden detectar mediante el flujo de aire la ubicación de libreros, sillas o muebles, y en base a esto ajustar sus movimientos. Como podrás suponer esto les ayuda mucho a los gatos que han perdido su sentido de la vista.
Al tratar de pasar a través de una reja o introducirse a algún lugar mediante un orificio, el gato intentará ingresar primero su cabeza, y con el ancho de sus bigotes sabrá si es seguro continuar introduciendo el resto de su cuerpo.
Cuando el gato está estresado o enojado, notarás que sus bigotes se estiran un poco hacia su cara, y cuando está relajado, lo harán hacia el frente.
Bajo ninguna circunstancia se deben cortar o arrancar los pelos del bigote de los gatos, ya que podrán sufrir de desorientación.