Si tienes un gato en casa, te habrás dado cuenta de que pueden ser muy miedosos.
Pueden tenerle miedo a personas desconocidas, al timbre de tu casa, a la aspiradora, a sonidos en el exterior, a aparatos que suenan muy fuerte, e incluso hasta a una bolsa o maleta específica.
Los gatos tienen mucha precaución y se toman cada posible riesgo muy en serio.
Al percibir el peligro, lo más común es que corran y se escondan debajo de tu cama o de algún mueble.
Mientras sea algo ocasional, es normal, pero si consideras que tu gatito está teniendo experiencias muy intensas y continuas, debes acudir con tu Médico Veterinario, quien te dirá qué hacer.