Observando y reconociendo ciertos comportamientos en los gatos, podemos saber si tienen miedo.
Cuando un gato tiene miedo, se observa lo siguiente:
- Se hace pequeño.
- Se reclina hacia atrás.
- Agacha su cabeza.
- Se queda quieto, en una esquina.
- Su cabeza se queda quieta, pero sus orejas se mueven, actuando como un segundo par de ojos.
- Si la agitación incrementa, su cola se mueve rápidamente.
- Si no ve un escape fácil, se hace más pequeño y bufa.
Un gato muy asustado puede ser peligroso, por lo que te recomendamos atender la raíz de su miedo y actuar con cautela.