Los gatos suelen mordernos mientras los acariciamos o jugamos con ellos.
En la mayoría de las ocasiones estas mordidas son suaves y no causan heridas en tu piel.
Los gatos pueden morder a manera de juego, o quizás porque no quieren ser acariciados de la forma que lo haces.
También se puede deber a que están llamando tu atención, recuerda revisar:
- Que tenga agua limpia y fresca.
- Que tenga suficiente comida.
- Que su arenero esté limpio y con suficiente arena.
- Haber jugado con tu gato.
- Haberle prestado atención.
Si las mordidas son demasiado agresivas, causándote heridas en la piel, debes llevar a tu gato al veterinario para que te oriente sobre su salud.