Los gatitos son animales muy limpios, ellos hacen sus necesidades en un arenero y de inmediato tapan sus desechos para esconder el olor.
Si eres el nuevo propietario de un felino, te damos estos tips que te serán de mucha utilidad.
- Compra un arenero lo suficientemente grande de acuerdo al tamaño de tu gato. Debe poder moverse cómodamente dentro de él. Si es recién nacido, seguramente cualquier tamaño le acomodará.
- Es importante escoger una buena arena, siempre teniendo en cuenta tu presupuesto, claro está. Algunas son aglutinantes, lo que significa que al recibir líquidos se forma una especie de roca que será muy fácil levantar y no se contamina el resto de la arena. Otras tienen odorizantes, los cuales pueden llegar a causar alergias en algunos gatitos. Tienes que probar cuál le va bien al tuyo.
- Limpieza. Lo ideal es limpiar el arenero cada vez que tu gato lo utiliza, pero si no te es posible, al menos hazlo una vez al día. Algunos gatos se rehúsan a utilizar el arenero si no está en condiciones impecables, y lo más probable es que hagan sus necesidades en cualquier otra parte de tu casa.
- Consigue una palita para recoger los desechos. La puedes enjuagar en el lavadero para mantenerla limpia.
- Aunque los gatos son muy metódicos para tapar su excremento, siempre trata de revisarlos ya que a veces pueden mancharse accidentalmente.
- Coloca el arenero en un lugar donde puedas limpiar los alrededores fácilmente ya que inevitablemente salpicará arena.
- El arenero debe estar siempre alejado del lugar donde tu gatito come, de lo contrario es posible que no lo quiera utilizar.
Por último, recuerda observar a tu gato, ya que te hará saber de cualquier inconformidad que tenga mediante maullidos o comportamientos.